
El Racing más cántabro (seis canteranos, titulares) dio la cara en Gijón
Christian adelantó a los verdiblancos en un llamativo partido de Mario Fernández (2-1)
Conseguida la permanencia, con tiempo suficiente, el Racing acudió a El Molinón a cumplir el compromiso. Visitó un estadio en donde los astures no perdieron un parido en toda la segunda vuelta En un recinto abarrotado el Racing dio la cara, perdió (2-1), pero demostró, sobre todo, que hay futuro. Marcelino alineó de salida a seis futbolistas nacidos en Cantabria (Mario Fernández, Christian, Tato, Munitis, Luque e Iván Bolado) que no solo replicaron con toda dignidad al Sporting, sino que, además destacaraon. En este capítulo Mario Fernández resultó el más brillante, con una decena de espectaculares intervenciones durante la primera mitad, resolviendo con eficacia, agilidad y suficiencia, el acoso asturiano. Los demás demostraron que hay mañana más que esperanzador y que la temporada no ha sido en balde, ni mucho menos.
De salida, los verdiblancos frenaron al Sporting. El bloque asturiano caía en imprecisiones por la obligación que tenía de puntuar para asegurar la continuidad en la máxima categoría. El elenco racinguista resistía sin problemas y buscaba la eficacia a la contra. Durante los diez primeros minutos hubo pocos lances de gol, pero casi todos favorables a los cántabros. Mucho antes de que Christian adelantara al Racing en el marcador, el mismo lateral rondó la diana en el nueve, en una acción en la que acabó marcandol, pero el árbitro anuló por fuera de juego de un compañero. Daba la impresión de que las réplicas visitantes podían hacer mucho daño. Todo ello con un equipo donde Tato y Luque debutaban como titulares y Mario en Liga.
Pasados esos instantes iniciales, el Racing padeció el acoso de un contrario obligado a empujar a tope por mor de la clasificación. Así pasó. El Sporting se olvidó de sus dudas y desajustes para dar por bueno que lo importante era pisar el área racinguista. Quizá se olvidó de que Mario Fernández, un santanderino más, estaba dispuesto no solo a debutar como titular en un partido de Liga de Primera División, tras sus esperanzadores estrenos en Copa, sino que pretendía certificar que hay portero de nivel. Y así fue. la reválida que el Sporting planteó a Mario se certificó con insistentes jugadas y evidentes oportunidades.
Diez paradones diez
La exhibición del joven portero fue nada menos que de una decena de intervenciones, casi todas espectaculares, en apenas media hora. Llegó a parecer poco menos que imbatible. Mientras sus compañeros mantenían el orden, intentaban frenar al rival y ansiaban la contra, el portero resistía. En los minutos 13, 16, 20, 25, 28, 39, 42 y 43 firmó sus asombrosas paradas. Diego Castro, De las Cuevas, Barral y demás delanteros gijoneses no encontraban la rendija. Siempre aparecía Mario para trancar la puerta y demostrar reflejos, rapidez, precisión y colocación. Cuando no llegaba al balón la base del pablo (dos veces) ampliaba la pared. Si Christian daba ventaja (0-1) al Racing en el 39, el Sporting se lanzaba descarado al ataque y a los 44 un pase atrás, desde la derecha, lo resolvió De las Cuevas con el gol de la igualada.
Aunque la presión del Sporting obligó al Racing a entregarse a la faena de aguantar, los de Marcelino también tuvieron sus opciones. Segundos antes de la igualada asturiana Luque, que va a más cada jornada, llegaba a la línea de fondo y ensayaba el remate sin apenas ángulo. En el centro del campo el camargués Tato organizaba y ayudaba al griego Tziolis en una improvisada línea media. Así se llegaba a un intermedio más que deseado por el tremendo esfuerzo de ambas escuadras. El Sporting se agotó de tanto atacar, pero Mario contuvo el chaparrón y asedio con una actuación que sorprendió a todos.
Segunda mitad más discreta
El Sporting, siempre necesitado, trató de resolver apenas iniciada la segunda fase. Y lo consiguió porque, a los seis minutos aprovechó un apurado despeje en corto de Henrique para marcar. A partir de ese tanto los rojiblancos se afanaron en asegurar la victoria de la permanencia. Organizados, con menos prisas que antes y centrados en la labor defensiva, hicieron casi imposibles los deseos verdiblancos de empatar. El 2-1 bastaba para los locales que seguían aguardando su oportunidad de ampliar diferencias. Tal opción provocó que Mario siguiera destacando. El ataque del Sporting ya no se parecía en nada al de la primera fase, pero en los minutos 54, 56, 83 y 85 el portero racinguista completó su examen con matrícula. Barral, De las Cuevas y Morán le plantearon las pruebas y las solventó con solidez.
Control final
Hasta el término del choque el Racing aumentó los minutos de control del juego y balón. Pasó contados apuros, pero apenas lograba incordiar el área del Sporting. Era como si la tormenta de la primera mitad pasara factura y el desenlace empezara a escribirse. Los cambios, con las entradas de Francis, Ariel y Lacen insistieron en el trabajo que pretendía acabar con la vocación ofensiva de los astures y no permitir más alegrías ofensivas.
El encuentro se fue diluyendo sin notables modificaciones y tanto Racing como Sporting cumplían con una cita más del campeonato. Unos, como decía Marcelino, ya serenos y seguros tras asegurar la permanencia en citas anteriores, otros también más tranquilos porque el marcador iba como pretendían. El final del campeonato está apenas a una jornada y los músculos empiezan a indicar que el esfuerzo está casi hecho. Racing y Sporting pasaron así de una confrontación descarada a una cita en la que importaba dar la cara y mantener el buen nivel técnico de las últimas fechas. Para los amantes de lo local la presencia de cántabros que completaron más de medio equipo titular también fue un detalle a tener muy en consideración. La cantera cuenta y mucho no solo en número sino, asimismo, en calidad y futuro inmediato.
Dos días de descanso
El Racing regresó esta noche a Santander y el equipo tendrá dos jornadas y media de descanso. Lunes y martes no deberá acudir a las Instalaciones de La Albericia, pero sí el miércoles, a las 17,30.
FICHA TÉCNICA
Sporting: Juan Pablo, Sastre (Lora m 64), Botía, Iván Hernández, José Ángel, Rivera, Nacho Cases, Nacho Novo (Luis Morán m 69), De las Cuevas, Diego Castro (André Castro m 81) y Barral.
Racing: Mario Fernández, Pinillos, Henrique, Torrejón, Christian, Luque, Tziolis, Tato (Lacen m 75), Munitis (Francis m 69), Bolado y Rosenberg (Ariel m 56).
Goles:
0-1: M. 31 Centro en diagonal de Pinillos y Christian, el otro lateral, gana la espalda a la defensa asturiana marcando con la bota izquierda al primer toque.
1-1: M.44 Centro desde la banda derecha y De las Cuevas, desde el centro del área, marca de tiro cruzado.
2-1: M. 51 Ataque asturiano, con rechace apurado de Henrique y Nacho Novo aprovecha para anotar.
Árbitro: Miguel Ángel Ayza Gámez (Comité Valenciano), amonestó a Miguel de las Cuevas.
Incidencias: Partido de la penúltima jornada de liga en Primera División. Se guardó un minuto de silencio por las víctimas del terremoto de Lorca. Aproximadamente 26.000 espectadores en El Molinón. En las gradas unos 400 seguidores del Racing. El público aplaudió de forma especial la retirada de Sastre y Diego Castro que dejan el Sporting, tras varios años de notable entrega. El equipo asturiano ejecutó 16 saques de esquina por uno el Racing.
Fotografías AMMEDIA