
Enhorabuena afición: un año más en Primera
El Racing asegura con brillantez la permanencia matemática
Ya es de forma matemática. El Racing y su afición seguirán un año más en Primera División. La victoria brillante conseguida en Los Campos de Sport ante el Atlético de Madrid (2-1), unida a la derrota del Getafe CF, otorga la salvación de forma segura para los verdiblancos. Felicidades racinguistas.
Y nada mejor que conseguir la permanencia en un partido tan vibrante y emocionante como el vivido y disfrutado en El Sardinero. Primero, por el acto de homenaje, sencillo, sobrio, serio y lleno de cariño, tributado a Severiano Ballesteros, que recibió la mayor ovación escuchada en el estadio verdiblanco. Segundo, porque agarrados a ese espíritu guerrero de Seve, los jugadores se sobrepusieron a la adversidad, dieron la vuelta al marcador y, espoleados por el público, caminaron de forma contundente hasta la victoria final.
Triunfo vital en casa. Unas gradas que recordaron a nuestros antepasados, a la Gradona de los Malditos, al Tirabeque, al Ra, Ra, Ra. Unos Campos de Sport que han vuelto a ser inexpugnables y que han visto como su equipo lo ha dado todo hasta el triunfo definitivo.
Tres victorias consecutivas por primera vez en la temporada. Y en el mejor momento. Para dejar sentenciado el campeonato. Salvados a falta de dos jornadas para concluir la Liga. Gracias cuerpo técnico, jugadores y gracias, de corazón, afición.
Emociones fuertes
Más emociones, difícil de soportar. Los corazones verdiblancos sufrieron y disfrutaron como pocas veces. Sufrieron porque recordaron profundamente a Ballesteros y, además, porque su equipo comenzó perdiendo, pero fue capaz de dar la vuelta al marcador, de remontar ante el campeón de la Europa League y candidato a disputar competiciones continentales.
La salida racinguista fue, como decía Ballesteros cuando empezaba un torneo a tope, "de las de caballo de carreras". Lo importante era, como también apuntaba en sus tiempos gloriosos el pedreñero, que no se transformara en "carrera de burros". Y al principio así parecía que pudiera ocurrir. No bastaba con que los verdiblancos pusieran todo su empeño, que apostaran por el contragolpe y que empezaran metiendo miedo a los rojiblancos. El espíritu de Seve, racinguista a tope, insufló, seguro, la energía que la escuadra necesitaba ante uno de los rivales más potentes del fútbol español.
En unos instantes se pasó de rondar el gol, a encajar el tanto. Fue a los 10 minutos y el entusiasmo de la grada recibió un mazazo. Fue en la salida de un saque de esquina en el que Mario Suárez marcó, hábilmente, desde el exterior del área.
El revés que transformó
El revés de la diana atlética transformó al Racing. El equipo cambió su faz y sufrió el toque y toque de los madrileños. Pasó de replicar con peligro a verse dominado y a afanarse en resistir. Incluso, pudo encajar el segundo cuando, a los 21, Antonio López ejecutó un falta y Toño llegó hasta la escuadra izquierda despejando, brillantemente, a córner.
Pero el cuadro de Marcelino no se entregó y supo pasar esos minutos de bajón. El balón era del Atlético, pero no tradujo su domino en ocasiones, gracias al trabajo solidario de los locales. Pero pasada la media hora llegó la reacción. Como hubiera hecho Seve, a una mala bola le tenía que suceder un golpe magistral, de esos que ni siquiera la imaginación es capaz de diseñar. Primero, los verdiblancos avisaron con un tiro de Kennedy a las manos de De Gea, finalizando una acción combinativa de Tziolis, Rosenberg y Giovani. Después, la recreación en el tiro. Fue el mismo Kennedy, a los 37, con una falta sobre Giovani, metros antes del lateral del área. El libre directo, con escaso ángulo, fue ejecutado con potencia por el sueco y De Gea no fue capaz de atajarlo. Era el gol del empate y el empujón definitivo para la reacción.
Salida resolutiva
Salió el Racing en la segunda mitad, de nuevo, cual equipo de carreras. Se olvidó del ritmo de algunos minutos de la primera fase y trató de culminar la remontada. El reto era complicado ante un contrario de alto nivel al que había que anular y rematar. Así lo hicieron Giovani y Rosenberg a los 3 minutos, con bello y trabajado tanto del sueco. Gol que vale la tranquilidad, una temporada, un gran premio a un esfuerzo tremendo.
El gol animó a los racinguistas y les demostró que estaban en lo cierto cuando jugaban al contragolpe. Con el Atlético lanzado a la ofensiva y volviendo a insistir en el toque de balón, el partido entró en una fase difícil. La resistencia verdiblanca fue más que meritoria. Pero no se quedó en eso porque si el orden defensivo subió de tono, los contragolpes fueron dañinos. El más reseñable fue el de Giovani a los 13, con una veloz y larga carrera y envío final a la base del poste.
Todos a una
Minutos después llegaron los cambios, porque se acusaba el esfuerzo y era necesario el relevo. Christian, Luque y Francis tomaron el testigo y reforzaron al máximo, con pleno de eficacia, el sistema defensivo. Tanto que el Racing ni se vio agobiado, ni sufrió ocasiones. Y cuando el bloque verdiblanco acusaba la tremenda exigencia de la tarde-noche, cuando ya el aire casi no llegaba a los pulmones de los jugadores.... allí volvía a estar la afición, como en los mejores tiempos. Su respaldo fue decisivo y empujados por sus aplausos, gritos y cánticos llevó al bloque al éxito de estar un año más en Primera.
Todo acabó con euforia en las gradas, abrazos prolongados en la cancha, ovaciones y festejo general. Se alcanzó la meta de forma casi heroica. Primero contragolpeando, después resistiendo y finalmente defendiendo con orden máximo. Tres victorias consecutivas. Más triunfos en El Sardinero. No extrañó que, en la sala de prensa, Marcelino hablara de misión cumplida, calificara con un diez a su plantilla y se emocionase al felicitar a los jugadores por la extraordinaria entrega que ha conducido a tan excelente clasificación a dos jornadas del final. "Estoy tremendamente feliz". Y todo el racinguismo también, Marce. Enhorabuena para todos.
FICHA TÉCNICA
Racing: Toño; Pinillos, Álvaro, Henrique, Cisma; Kennedy (Francis, min 82), Tziolis, Lacen, Munitis (Christian, min 66); Giovani (Luque, min 71) y Rosenberg.
Atlético de Madrid: De Gea; Valera, Ujfalusi, Domínguez, Antonio López (Filipe, min 80); Tiago (Fran Mérida, min 84), Mario Suárez; Elías (Forlán, min 56), Reyes, Koke; y Agüero.
Goles:
0-1, min 11. Tiago botó un córner, Domínguez prolongó al primer palo y el despeje de Toño lo alcanzó Mario Suárez, para colocar, desde el exterior del área, fuerte y con el interior, ajustado al palo, a la derecha de Toño.
1-1, min 38. Falta por la izquierda del ataque verdiblanco, escorada y cercana a la banda. Kennedy ejecutó fuerte y el balón entró, entre Henrique y Valera y después de botar en el portal De Gea.
2-1, min 48. Acción en largo de Gionavi, con pase a Rosenberg quien pugna con Domínguez, controla y marca junto al palo.
Árbitro: José Luis González González (comité castellano leonés). Mostró cartulinas amarillas a Álvaro y Toño por el Racing y a Ujfalusi y Reyes por el Atlético.
Incidencias: Partido de la jornada número 36 de la Liga de Primera División disputado en los Campos de Sport de El Sardinero ante unos 16.428 espectadores. Antes del encuentro se desarrolló un programa de actos en memoria de Severiano Ballesteros, entre ellos un minuto de silencio que también se dedicó a Juan Torrés Lledo, padre del jugador del Atlético Juanfran, fallecido el domingo.